¿Qué es la xerojardinería?
Origen y objetivos de la xerojardinería
La xerojardinería es un concepto surgido en los años 80 a raíz de las constantes sequías sufridas en los años anteriores en el oeste de Estados Unidos. Su etimología proviene de la unión de los términos xeros (seco) y landscape(paisaje), y sirve para describir el conjunto de técnicas de jardinería focalizadas en el ahorro de agua. En general, este tipo de jardines pueden llegar a consumir una cuarta parte del agua que utilizan los jardines convencionales.
Además, minimizar el consumo de agua no es el único objetivo de la xerojardinería. En la actualidad, este tipo de jardines también se caracterizan por ser espacios verdes ecológicos, donde se intenta limitar el uso de productos fitosanitarios, la maquinaria con combustible, etc.
Los principios de la xerojardinería
El ahorro de agua es la base de la xerojardinería. Para lograr este objetivo deben realizarse una serie de procedimientos:
- Diseño y planificación:
El primero paso es realizar una separación del jardín en tres zonas dependiendo del consumo del agua: consumo bajo, moderado y alto. En la zona de consumo bajo ubicaremos las especies de plantas que necesiten menos cantidad de agua y que son toleran bien los períodos de sequía. La zona de riego medio tendrá una cantidad de agua moderada para aquellas plantas necesiten ayuda para extenderse más rápido. Por último, el espacio más pequeño de nuestro xerojardín, será la zona húmeda, donde el nivel de riego será mayor.
- Selección de las plantas:
Utilizando plantas tolerantes a la sequía o de bajas necesidades hídricas y que estén bien adaptadas al entorno y su pluviometría.
- Limitar las zonas de césped:
En los xerojardines se minimiza la plantación de césped tradicional por su elevado consumo de agua.
- Riego con agua disponible:
Para optimizar el uso del agua, es común instalar sistemas de recogida y almacenaje, por ejemplo, para reutilizar el agua de lluvia para riego.